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¿Por qué Hollywood santifica a los villanos?

El otro día fui a ver Cruella de Craig Gillespie y acabé confusa, por decirlo de algún modo. Recuerdo que de pequeña me daba mucho miedo el personaje de Cruella de Vil porque era asombrosamente mala; sin embargo, la versión de Emma Stone te hace querer aplaudirla y adentrarte en el mundo de la moda. Es por esto que al llegar a casa decidí visionar 101 dálmatas. Volví a pensar lo mismo, es de las mejores villanas por su simplicidad, llega de la nada y roba a los perritos para quitarles la piel y hacerse abrigos. Entonces ¿por qué esa obsesión por limpiar su imagen?

Al principio pensé que era la falta de creatividad, no solo de Disney, sino de Hollywood en general al no tener nuevas ideas que funcionen en pantalla, es por eso que tiran de los clásicos y los adaptan para el público infantil; aunque no creo que sea solo eso. Hay una tendencia por parte de la industria estadounidense por justificar la maldad. Los villanos son mucho más interesantes que los héroes, pero no son capaces de darles una historia que no sea blanqueada por la moralidad. No solo ha pasado con Cruella, ya lo hicieron con Maléfica unos años antes (e incluso sacaron segunda parte), o si queréis iros más lejos podemos hablar de la masacre que hicieron con el live action de Death Note, esa adaptación no debería haber salido a la luz y menos con un Kira que justificaba su odio a través del tópico de ser un pringado de instituto.

Aquí entraríamos en el debate de si realmente existe la maldad en su estado más puro o si, por lo contrario, es algo que se adquiere a base de palos. Yo tengo la teoría de que sí hay gente mala porque sí, y aunque estuviese equivocada, no soy partidaria de transformar a los villanos de la ficción en santos, los volvemos aburridos como los héroes; personajes que ya de por si están bastante vacíos. Me hace pensar que la existencia de los villanos es demasiado enrevesada para algunas mentes y por eso les dan un significado a sus conductas. O quizás sea porque tienen miedo de que la gente se obsesione con el malo y quiera imitar su actos. Ya sabemos cómo se ponen con este tema de las «malas influencias».

No paro de pensar en una frase del Joker en el Caballero Oscuro cuando en el interrogatorio con Batman le dice, en resumidas palabras, que el héroe existe gracias al villano. Gran verdad. Para los que no estén de acuerdo conmigo, solo les diré que hace no mucho leí un artículo donde clasificaban a los antagonistas de mejor a peor, y en primer lugar se hallaba El señor Potter, no el mago, sino el personaje de !Qué bello es vivir! ¿Por qué? Porque, según los expertos, aparece siendo malo y acaba la película siendo igual, nada de evolución, nada de excusas, es horrible y ya está. Gracias a eso los protagonistas brillan y el final feliz se disfruta más.

Todo esto es una opinión sin más. Hay algunos antagonistas que tienen una buena historia de fondo, creadas para hacernos empatizar y dar el toque de gracia al final de la película, como el caso de Snape en Harry Potter o el mítico Darth Vader; sin embargo, creo que estos casos se dan cada vez con menos frecuencia.

Espero no haberos dado demasiado dolor de cabeza con el tema. ¿Qué opináis vosotros?

Un saludo.

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Sí, quiero de Lisa Kleypas

Volvemos a la rutina literaria reseñando la última novela que leí en junio, se trata, por lo que podréis ver, de Sí quiero de Lisa Kleypas.

Sinopsis

El mujeriego y alocado Andrew, conocido como Lord Drake, ha sido desheredado por su padre. Antes de que su progenitor muera a causa de una larga enfermedad, intentará convencerle de que ha cambiado tramando una estratagema con la siempre correcta Caroline Hargreaves. Ambos fingirán un compromiso que con el tiempo harán surgir sentimientos inesperados.

Reseña

No es un libro lo suficientemente largo como para sacar pequeños detalles destacables. Una novela corta sin más, de hecho, me la terminé en una tarde. Debo reconocer que es la primera vez que leo a esta autora, o al menos que yo recuerde, y para colmo he comenzado por la tercera parte de una de sus trilogías. Desde aquí agradecer a la seguidora que me lo advirtió por Instagram. La trilogía en cuestión se llama «Teatro Capitol», por si os interesa empezarlo como es debido, sin seguir mi ejemplo. Aun así, intentaré ser lo más objetiva posible con la historia.

A pesar de seguir fomentando los clichés acostumbrados, me ha parecido una historia amena con una protagonista femenina fuerte, decidida y alejada de los cánones de belleza ya tan manidos. Caroline supera con creces en intelecto a Andrew, que queda a merced de sus sentimientos hacia ella. Me gusta que sea él el que cambia, el que gira por completo su vida por influencia de ella y no al revés. Lord Drake llega a resultar manipulable y emocionalmente inestable, por lo que requiere la fuerza de la protagonista para seguir adelante, eso es sinceramente un gran punto a favor de la historia y por su puesto del talento de su autora.

En cuanto a lo demás, el eje argumental es simple y bastante común. Las historias secundarias son escasas, es más, apenas hay personajes y el final llega demasiado pronto. Cuando la trama se complica y llega a su clímax, la resolución llega en pocas páginas, incluso me atrevería a mencionar el famoso Deus ex machina tan frecuente en las pelis de Woody Allen. Ojalá todos los problemas se solucionasen tan rápida y satisfactoriamente. Por desgracia, esto suele ocurrir en muchas obras de este género, donde hay una prisa desmedida por llegar a un final simplón que alegre a los lectores, pero por desgracia queda una sensación de novela mal conexa que perjudica a todo lo bueno antes comentado.

Por resumir un poco, no me ha enamorado como muchas otras obras de autoras como Julie Garwood, pero…No está mal. Es una buena elección narrativa para una tarde de sopor. Os acompañáis de una buena taza de café y os acabáis el libro de una sentada.

Nos vemos el próximo día queridos lectores.